Eter, aire, fuego, tierra y agua, los cinco elementos básicos se manifiestan en el cuerpo humano como tres principios básicos o humores, conocidos como la tridosha.
A partir del eter y el aire, se manifiesta el principio corpóreo del aire llamado vata. Los elementos fuego y agua se manifiestan juntos en el cuerpo como el principio de fuego llamado pitta. La tierra y el agua se manifiestan como el humor del agua llamado kapha.
Estos tres elementos -vata, pitta y kapha- gobiernan todas las funciones biológicas, psicológicas y patológicas del cuerpo, la mente y la conciencia. Actúan como constituyentes básicos y barreras protectoras del cuerpo, en su condición fisiológica normal. Cuando están desequilibrados, se desarrolla el proceso de la enfermedad.
Vata es el principio del movimiento. Lo que se mueve se llama vata y por ello puede traducirse como el principio corpóreo del aire. Pero el elemento aire de atmósfera no es el mismo que el del cuerpo. El aire corpóreo o vata se caracteriza por la energía sutil que gobierna el movimiento biológico. Este principio de movimiento biológico engendra todos los cambios sutiles en el metabolismo. Vata está formado por los elementos eter y aire. Vata gobierna la respiración, el parpadeo, el movimiento de los músculos y tejidos, las pulsaciones del corazón, toda expansión y contracción, los movimientos del citoplasma y las membranas celulares, y el movimiento de los simples impulsos nerviosos. Vata también gobierna los sentimientos tales como nerviosismo, miedo, ansiedad; los dolores, temblores y espasmos. Vata se asienta en el intestino grueso, la cavidad pélvica, los huesos, la piel, los oídos y los muslos. Si el cuerpo desarrolla vata en exceso, se acumulará en estas áreas.
Pitta se traduce como fuego, aunque el término no tenga literalmente este significado. El fuego de una vela o chimenea se puede ver, pero el calor-energía del cuerpo, la pitta-dosha, que se manifiesta como metabolismo, no es visible. Pitta gobierna la digestión, la absorción, la asimilación, la nutrición, el metabolismo, la temperatura del cuerpo, el color de la piel, el lustre de los ojos; también la inteligencia y el entendimiento. Sicológicamente pitta despierta furia, ira, odio y celos. Los lugares de pitta son el intestino delgado, las glándulas sudoríparas, el estómago, la sangre, el tejido adiposo, los ojos y la piel. Pitta se forma por los elementos fuego y agua.
Kapha es agua biológica. Este principio se forma por dos elementos: agua y tierra. Kapha consolida las sustancias del cuerpo generando los elementos para su estructura física. Esta dosha mantiene la resistencia del cuerpo. El agua es el constituyente principal de kapha y el responsable de la fuerza biológica y la resistencia natural de los tejidos del cuerpo. Kapha lubrica las articulaciones, provee humedad a la piel, ayuda a sanar las heridas, llena los espacios del cuerpo, da fortaleza, vigor y estabilidad, apoya la retención de la memoria, da energía al corazón y a los pulmones y mantiene la inmunidad. Kapha está presente en el pecho, la garganta, la cabeza, los senos paranasales, la nariz, la boca, el estómago, las articulaciones, el citoplasma, el plasma y las secreciones seromucosas del cuerpo. Sicológicamente, kapha es responsable de las emociones de apego, avaricia y envidia; también se expresa en tendencias a la calma, al amor y el perdón. El pecho es el sitio de kapha.
El equilibrio de la tri-dosha es necesario para la salud. Por ejemplo, el principio del aire puede encender el fuego del cuerpo, pero el agua es necesaria para controlar el fuego. De otra manera, el fuego del cuerpo quemaría los tejidos. Vata mueve a kapha y a pitta, pues esto son inmóviles.
La tri-dosha gobierna las actividades metabólicas: anabolismo (kapha), catabolismo (vata) y metabolismo (pitta). Cuando vata está desequilibrada, el metabolismo se perturba, resultando un catabolismo excesivo, que provoca el proceso de deterioro del cuerpo. Cuando el anabolismo es mayor que el catabolismo, hay un incremento en el crecimiento y reparación de los órganos y tejidos. Kapha en exceso incrementa el grado de anabolismo y vata en exceso crea enflaquecimiento (catabolismo).